domingo, 30 de septiembre de 2012

Sobre el 25S

Mi espalda es lo suficientemente ancha y lo suficientemente fuerte; no sería más que un cobarde si me fuera y dejara que ellos sufrieran los problemas sabiendo que la mitad de ellos no son capaces. "Ellos que son fuertes deben aguantar las flaquezas de aquellos que son débiles y no pensar en su propio placer” Hay algo que de tan evidente no necesita mostrarse; brilla con luz propia. Está muy claro que te equivocas en la vida si vas detrás de esto y lo otro para hacer que las cosas sean más fáciles y placenteras para ti mismo. Un cerdo puede meter su hocico en el comedero y no pensar en nada más; pero, si tiene y el corazón y el alma de un hombre, no puedes permitirte dormir en una cama mientras que los demás duermen encima de las piedras. No, no. Nunca sacaré mi cuello del yugo y dejaré que la carga la lleven los débiles.
George Eliot, Adam Bede.  


Antes de realizar nuestras propuestas al debate que plantea el 25S, creemos que es necesario comenzar con algunas preguntas acerca de este movimiento y de los que desde el año pasado hemos vivido en nuestro país, con el fin de establecer un punto de partida claro a partir del cual tenemos que desarrollar el proceso de cambio cuyo anhelo ha movilizado a tantos miles de personas.

1º) ¿Qué cambios reales se han conseguido desde el comienzo de las movilizaciones del 15 de mayo del año 2011 –y recordemos que el inicio de la crisis data del 2007- así como de las dos huelgas generales convocadas, tanto con el gobierno del PSOE como con el PP? 
Respuesta: Más derechización.

2º) ¿Qué objetivos concretos se han decantado de todo este movimiento asambleario, aparte de impedir casos puntuales de abusos, desahucios o de reivindicar más democracia en unos casos o democracia real en otros? 
Respuesta: Ninguna.

3º) Si el 25S reivindica un proceso constituyente, ¿sobre qué plataforma de principios, al menos mayoritariamente aceptados, debe arrancar?

Desde la Asociación Aletheia queremos vivificar la movilización ciudadana con propuestas concretas de debate político, más allá del "NO" de las pancartas y de la necesaria condena de la represión policial. Por esta razón, lanzamos el siguiente MANIFIESTO como propuesta de principios fundamentales para el comienzo de un proceso constituyente:

La crisis que actualmente estamos padeciendo se achaca principalmente a la especulación financiera. Sin embargo, nosotros afirmamos que la esencia del sistema capitalista es la especulación de todos los bienes que la sociedad ha ido conquistando a lo largo de su dolorosa historia. Porque especular es apartar las cosas de sus verdaderos fines para obtener de ellos un beneficio particular.

- Se especula con el derecho al trabajo, que ha de ser un bien universal, cuando del derecho a propiedad privada de los medios de producción se obtiene un beneficio particular.

- Se especula con el derecho a la realización personal en el trabajo, es decir, de la dignidad del trabajo, cuando por falta del mismo y, dada la propiedad privada de los medios de producción, hay que aceptar cualquier trabajo para que el propietario obtenga un beneficio.

- Se especula con el derecho universal a la salud cuando ésta se vincula al negocio que busca beneficio privado.

- Se especula con el derecho a la educación cuando ésta se vincula al negocio que busca beneficio privado.

- Se especula con el derecho a una vivienda digna cuando el suelo está privatizado y se busca obtener un beneficio de una necesidad ajena.

Y así un largo etcétera.

Nuestras conclusiones son las siguientes:

- Sólo se puede eliminar la especulación sobre el trabajo socializando los medios de producción y de depósitos de valor (lo que ahora denominamos “banca”).

- Sólo se puede eliminar la especulación sobre la dignidad del trabajo con la medida anterior y mediante la equiparación en valor de todos los trabajos que sean socialmente necesarios.

- Sólo se puede eliminar la especulación en la salud cuando el derecho a ésta sea realmente universal: la misma calidad para todos y todos (también los políticos) en el mismo sistema de salud.

- Sólo se puede eliminar la especulación en la educación si, de igual modo que la sanidad, es realmente universal y, además, introduce entre sus objetivos prioritarios el desarrollar en los educandos simultáneamente el reconocimiento de la propia singularidad y el desarrollo de su conciencia y sensibilidad social. De esta manera podrán tomar conciencia de que sus derechos son indisociables de la afirmación de los derechos de los otros.

- Sólo se puede acabar con la especulación de la vivienda digna socializando el suelo y priorizando necesidades en función de los recursos disponibles.

Según esto, POLÍTICA será aquella forma de organización que permita la consecución de los anteriores objetivos. Para ello es necesaria la transparencia social, que implica una doble igualdad:

1º) La igualdad de ingresos. Sólo sabremos las verdaderas necesidades de los otros si vivimos como ellos y,  por tanto, sólo de esta manera podremos resolver realmente los problemas de todos y no como siempre: antes unos y después los otros. Aunque ese después nunca llegue para algunos.

2º) La igualdad real de oportunidades para que cada uno pueda realizar su auténtica vocación y no venderse por un plato de lentejas.

Por tanto, sólo si el representante vive igual que el representado y no posee privilegio alguno por su condición de político, el representante y el representado coincidirán totalmente.

ASOCIACIÓN ALETHEIA

lunes, 17 de septiembre de 2012

EXPLICACIÓN DE NUESTRO DIBUJO


Es nuestra intención desarrollar aquí una explicación de lo que quiere significar nuestro dibujo-símbolo, inspirado, como resulta evidente, en la famosa Danza de Matisse, al que hemos añadido una serie de símbolos -el Árbol de la Vida cuyas raíces se bifurcan y enlazan en dos serpientes que constituyen su base, el Yin y el Yang, el sol unificador y la simbología de tipo lógico- a los que hemos otorgado significación muy precisa.

El dibujo, como tal, forma un todo, lo cual remite a que Todo es Uno, principio y fin, Α y Ω. A partir de ahí, a partir de lo Uno, se engendra la diversidad. Así, desde Α hasta Ω, nos reconocemos en todos los cambios, porque todo cambio es inherente a nuestra esencia desde el momento en que somos Uno.
     
Pero esa misma unidad esencial de todo es, precisamente, la garantía de la máxima diversidad. Toda realidad tiene y debe tener su propia vida, pero siempre en función de la unidad del todo, porque sin unidad no hay diversidad, sino caos. La diversidad que se despliega de la unidad del todo es aquella en la que podemos reconocernos permanentemente sin dejar de ser nosotros mismos. Y es esto, precisamente, lo que posibilita la libertad.



De lo Uno y su diferenciación sin dejar de ser Uno, llegamos a lo que es Razón (simbolizada por el Sol del cual parten los rayos), la cual (entendida como el conocimiento de los límites entre necesidad y libertad) no es de ningún modo incompatible con esta última. A o no A (el lema incluido dentro del sol) es el principio lógico de no contradicción y representa el poder de diferenciación de lo posible desde lo que es Uno. Razón y libertad se coimplican, porque toda elección debe ser racional: se ha de elegir un posible, pero no pueden elegirse todos los posibles simultáneamente. La elección de una opción («A»), no implica la negación absoluta de la otra (no-A), sino que una se afirma mientras que la otra debe negarse relativamente. 

A y no A (en el pedestal del árbol) es el principio lógico de contradicción y representa la forma potencial de ser, lo que por sí solo no se puede realizar. A través de una elección, lo que es dos (una cosa y otra, A y noA) comienza a realizarse como uno. Pero una elección implica también realización, pues de lo contrario se trataría de una elección vacía, y esa realización da lugar a todo el Árbol de la Vida con toda su diversidad. Este principio de contradicción, A y no-A, también es la representación de la posibilidad limitada. En otras palabras, podemos elegir entre un número limitado de alternativas, porque si elegimos entre un número ilimitado no elegimos nada (cualquier número entre infinito da «0»).

La base del árbol representa lo que no es igual a sí mismo, el caos. Según  la filosofía de la Afirmación, lo Uno es tal porque su negación es relativa a su afirmación. Y la negación máxima de lo Uno es lo que es dos (el dualismo). Es ésta la forma más relativa de lo Uno: el caos. El caos es lo que no es igual a sí mismo, lo que siempre es otro, y por ello puede simbolizarse como «2 no es igual a 2» (una fórmula también incluida en el rótulo al pie del árbol). Sin embargo, hay que tener en cuenta que del caos nace inmediatamente lo posible; y lo posible es lo que la libertad realiza.

El tronco del árbol nos presenta un doble camino: uno descendente hacia el caos y otro ascendente hacia la plena realización. El árbol representa la naturaleza, permanente en su continuo cambio: camina hacia el caos y regresa de él permanentemente.

La justicia también se encuentra reflejada en este dibujo. Puesto que podemos definirla como el equilibrio entre lo contingente  y lo necesario, el punto de encuentro entre lo necesario que se diversifica (el dibujo de arriba a abajo) y lo contingente que se identifica (por el poder de elección de la conciencia, el dibujo de abajo a arriba) es la justicia (simbolizada en el Yin y el Yang).

También la mitología hindú hace referencia a la serpiente (aquí presente), a la que llama Ananda, y a la que entiende tanto como infinito (o lo que no se limita a sí mismo), como «residuo», esto es, lo que constituye materia para una nueva creación porque ya no posee identidad propia (es decir: «caos»), y de ahí que se encuentre en la base del dibujo.

Los rayos de luz representan el poder del amor. El amor no es otra cosa que la relativización de uno para hacer crecer al otro. De esta forma, el sol se niega relativamente para afirmar la vida de la naturaleza.

En cuanto a las figuras humanas, se trata de transmitir una idea de solidaridad basada en la alegría, y también en la fuerza, puesto que son ellas las que le han pisado la cabeza a la serpiente. Este gesto simboliza el poder del ser humano sobre el caos, que ya no se presenta aquí como peligroso u amenazante. Por otra parte, se han resaltado los contornos de las figuras humanas -al tiempo que cada una posee, gracias a la maestría de Matisse, su propia y bella posición-, porque se resalta la singularidad humana, pero entendida ésta siempre estrechamente vinculada a la solidaridad (y sin la cual entendemos que la primera acaba perdiéndose irremisiblemente). Precisamente porque cada uno es sí mismo,es por lo que puede ser capaz de ofrecer oportunidades, a sí mismo y a los demás. Sin embargo, mientras nos encontramos en proceso del logro de nuestra propia y auténtica singularidad, nos hallaremos en la triste situación de “robar” permanentemente identidad y, por tanto, enfrentados con los otros. 

El hecho de que falte la figura central que debería ir de espaldas en primer plano es debido a que se reivindica, a través del dibujo, la transparencia, sin la cual no es posible la alegría de la existencia. Al cerrarse el ser humano sobre sí mismo, el producto es una visión antropomórfica sobre el mundo incapaz de ver las cosas por sí mismas.

Por último, el pentágono que enmarca el dibujo hace referencia a las tres diferenciaciones de la conciencia (la base del pentágono: pensamiento, voluntad y amor), que hacen que el dos tienda hacia lo Uno (vértice del pentágono) en el Árbol de la Vida. Asimismo, el pentágono se vincula o hace alusión (y en este sentido constituye un homenaje a las mismas) a las religiones precolombinas que anuncian el advenimiento de un «quinto sol», concebido como una nueva creación que se entiende como definitiva.

viernes, 14 de septiembre de 2012

¿QUÉ PASA EN SUDÁFRICA?

Reproducimos a continuación parte del elocuente artículo de John Carlin, escritor y periodista británico, aparecido en El País el día 24 de agosto con el título "Sudáfrica y el fantasma mexicano", que describe las causas del terrible asesinato de mineros en las revueltas del pasado mes por parte de la policía. El análisis pretende hacer una comparación entre el Congreso Nacional Africano como partido dominante después de la caída del apartheid y el PRI mexicano, convertido en un lobbie que realiza las funciones de los antiguos opresores antes de su nacimiento.

"La conexión mexicana, la verdad, se me ocurrió a los pocos meses de que Mandela ganara aquellas primeras elecciones democráticas, acabando con tres siglos y medio de dominación blanca (...). Dije que temía que el CNA se acabara convirtiendo en un PRI, o en aquel PRI que en el siglo XX gobernó sin interrupción durante 70 años: es decir, un partido revolucionario institucional en el que -como delata el nombre- se apela a la retórica progresista de siempre, en defensa de las masas y tal, pero el objetivo principal es perpetuar una élite en el privilegio y el poder. El mecanismo que creó el PRI para forjar su "dictadura perfecta"-como decía Mario Vargas Llosa- fue una coalición entre el partido dominante, el sindicalismo, el empresariado y otras fuerzas sociales, apoyada por las fuerzas de seguridad.(...)



En Sudáfrica (...) los revolucionarios son hoy la imagen y semejanza (salvo en el color de la piel) de los antiguos amos que en su día, y con enorme sacrificio e idealismo, derrocaron.
(...) La revuelta de Marikana, la más dramática de miles que se han visto a lo largo de este año en las localidades pobres negras del país, escenifica la frustración y la rabia de un creciente porcentaje de la población contra el poder establecido. En este caso específico, la frustración de los mineros surgió por la complicidad que detectaron entre la empresa británica dueña de la mina de platino, Lonmin, y el sindicato que toda la vida les había representado. (...) Ahí nació Amcu, una organización más visceral que coherente, sin plan estratégico o ideología definida, pero que expresa los sentimientos de muchos mineros. Fue contra los mineros nuevamente incorporados a Amcu, en huelga por un aumento de sueldo, contra los que los policías dispararon.
La rabia de los mineros, la que desencadenó los actos violentos que condujeron también a la muerte de dos policías, a machetazos, proviene no sólo de la convicción de que reciben sueldos miserables, sino de ver que los jefes sindicalistas viven, relativamente hablando, como reyes. El presidente de la NUM (Sindicato Nacional de Mineros) gana 25 veces más al mes que los mineros que se unieron a Amcu. Cuando apareció en la mina de Marikana después de la masacre no pudo salir del coche de policía que lo transportaba, por temor a que lo mataran.
Lo que ha pasado es que tanto la NUM, como otros sindicatos que hace 20 y 30 años estaban en la vanguardia de la lucha contra el apartheid, como el Gobierno del Congreso Nacional Africano con el que están íntimamente aliados, se han aburguesado. (...) Pertenecen a una clase de animal distinta, depredadora, que se reparte el poder y la riqueza entre sí (...) Un personaje lo define. Se llama Cyril Ramaphosa, el fundador de la NUM en 1982, negociador número uno del CNA durante la transición a la democracia a principios de los noventa y ahora un magnate cuya fortuna se mide en cientos de millones de euros.
Ramahosa, un favorito de Mandela en su día y para muchos el que debería de haberle sustituido cuando dejó la presidencia, es miembro de la junta directiva de Lonmin, donde todos son considerados (y no sólo por Amcu) como unos viles explotadores. Pero Ramaphosa sigue siendo no sólo una figura emblemática en la NUM sino uno de los barones más influyentes del CNA. Como en México, en los años de gloria del PRI, las elecciones generales son insignificantes a la hora de determinar la identidad de futuros presidentes y de sus ministros comparado con las elecciones internas en la cúpula del CNA, donde un reducido número de políticos, sindicalistas y empresarios negros nuevos ricos centralizan el poder. (...)

lunes, 3 de septiembre de 2012

EL HOMBRE DEL FUTURO SEGÚN MIHAILO MARKOVICH


Transcribimos a continuación unas líneas del libro de Mihailo Markovic, Dialéctica de la praxis, donde podemos comprobar el profundo humanismo a partir del cual se desarrolla el pensamiento de este olvidado filósofo yugoslavo. Su visión del ser humano del futuro puede darnos muchas pautas de hacia dónde dirigirnos en momentos de desconcierto como los actuales, pues reconoce las profundas posibilidades humanas más allá de la alienación en la que vivimos. He aquí una apuesta por la humanización radical.

"El hombre del futuro debe liberarse de su dependencia de las necesidades naturales exteriores y de los ciegos poderes sociales, sus propios productos. El hombre del futuro debe desarrollar las formas creadoras de su actividad práctica y liberarse del trabajo degradante y forzoso. Debe acabar con la destrucción de bienes materiales y vidas humanas. Debe hacer coincidir sus intereses personales con los de los demás hombres y con los de la sociedad. No le estará permitido privilegio alguno (económico, político o cultural), lo que implicará la eliminación de las diferencias entre las clases y las castas y, quizá, también la completa igualdad de todos los individuos. El hombre del futuro no debe explotar a otros hombres; en otras palabras, nunca debe tratar a otro hombre como medio, sino siempre como fin.


En vez de hacer esfuerzos desesperados para poseer tanto como le sea posible, debe tratar de ser y de vivir una vida lo más rica, cabal y plena posible. Por ello, debe desarrollar todas sus capacidades potenciales, todos sus sentidos humanos, y refirmar su individualidad en sus diferentes relaciones con el mundo." (Pág.63)
"Si se piensa en la gran tradición humanista de los últimos veinticinco siglos, y se toman en cuenta algunos valores fundamentales de carácter general que en la actualidad constituyen la base de toda moral, es indiscutible que los hombres, en condiciones (por lo demás) iguales, tienden más a la libertad que a la esclavitud; que prefieren la actividad creadora al aniquilamiento y la pasividad de los trabajos rutinarios; que al egoísmo anteponen la preocupación por las necesidades sociales generales; que prefieren la racionalidad a ciertas formas de conducta regidas por fuerzas ciegas inconscientes, y que tienen en mayor estima al amor a la paz que la agresividad, etc. Sería falso y dogmático afirmar que solo estas características constituyen la naturaleza humana, mientras que todas las otras son simples apariencias, mera facticidad sin fundamento en la esencia del hombre. Para poder fundamentar en la filosofía y en la praxis un criterio universal de la determinación valorativa del hombre, es suficiente comprobar que estas características configuran aquello que debe ser considerado como la posibilidad óptima del ser humano. Concretar estas posibilidades óptimas significa llevar una 'verdadera', 'auténtica' vida humana. No aprovechar esta posibilidad óptima significa no ser una persona auténtica, no vivir una vida verdaderamente humana, en suma, estar alienado."(Pág. 69)

Fotograma de la película de Stanley Kubrick,
2001 una odisea del espacio (1968)

"Si estamos insatisfechos en la actual situación humana general y, por cierto, no solo con alguno  de sus aspectos, si estamos dispuestos a  buscar las raíces de las formas actuales de degradación humana, si estamos convencidos de que es inevitable un cambio mucho más profundo que la intensificación (más de una vez, sólo simbólica) del cuidado de los pobres y no desarrollados, debemos plantear, entonces, nuestra cuestión en forma más concreta y fundamental: debemos hablar de una humanización radical." (Pág. 71)

Mihailo Markovich, Dialéctica de la praxis, Amorrortu Ediciones, 1972.

Subido por Encarnación Almansa (Aletheia)

Relacionado con el mismo tema le recomendamos: LOS LÍMITES DEL ESTADO DEL BIENESTAR, LA JUSTICIA Y EL NUEVO SUJETO SOCIAL.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...